martes, julio 31, 2007
CocoRosie
Sierra Rose nació en Fort Dodge en Iowa y Bianca Leilani en Hawaii. Son la tercera y cuarta hija de Timothy Casady y Tina Hunter. Tal vez, su música y sus letras son fruto de esa infancia y adolescencia un tanto triste. Cuando Sierra tenía 5 años y Bianca 3, sus padres se divorciaron. A los 14 años, Sierra dejó a su madre y se fue con su padre, y desde entonces Sierra y Bianca dejaron de verse. Con 20, Sierra se mudó a París, para estudiar canto en el conservatorio. Bianca, por su parte, estudió filología y sociología, de allí su pasión por escribir, ya había escrito muchas canciones, tal vez malas, pero poco a poco alguna buena iba surgiendo. Fue en 2003 cuando Bianca decidió viajar a París, llamó de improviso a su hermana desde el aeropuerto y le preguntó si podía quedarse unos días con ella. Sierra accedió, lo que iba a ser una simple visita de unos días, se convirtió en una estancia de seis meses.
Un amigo en común, de Brooklyn, les pidió si querían tocar tres temas en su fiesta de cumpleaños, y ellas aceptaron, lo que no sabían, es que en esa escueta actuación, el amigo había llamado al jefe de Touch and Go, que las escucho por teléfono, y como lo que escuchó le gustó, se ofreció para publicarles el disco.
Estando juntas en el apartamento, se encerraron en la habitación más aislada y con mejor acústica, el baño, donde nació el dúo que bautizaron con los graciosos motes que les dio su mami, Coco y Rosie, y grabarón con un equipo rudimentario su primer disco “La Maison De Mon Rêve”. Se pasaron horas y horas trabajando en cada tema, disfrutando de cada instante de creación. Muchas publicaciones destacan su canción Lyla, dedicada a la protagonista de la película del sueco Lukas Moodysson dedicada a la prostitución infantil.
Lo característico de su música, no son los ruiditos de pulseras, zumbidos de abejas tal vez creados con transistores, que más que abejas parecen motocicletas, una gallina o vaca afónica, un timbre de teléfono, juguetes o melodías sencillas y dulces, de guitarra o piano, más bien son esas dos voces compactadas, la de Sierra en plan operístico como en el tema “Candy Land” o la de Bianca en plan Billie Holiday en “Madonna”.
En cambio, lo característico de sus letras, son la sencillez con la que relatan lo mejor y peor de la sociedad que las envuelve, capaz de transmitir somnolientamente lo amargo del presente.
Creo que Cocorosie es un buen ejemplo de experimentación, para una época en que muchas bandas nos toman el pelo con su “originalidad” de contenido nulo. Mucha gente, tuvo la oportunidad de verlas el 9 de septiembre de 2005 en la sala Sol, donde actuaron por primera vez en España. Tocaron temas de Noah’s Ark y La Maison De Mon Rêve. He de decir, que cuando las escuché por primera vez, pensé que eran un refrito de Portishead, pero en una posterior segunda y tercera escucha descubrí su sonoridad, su creatividad y su buen hacer, nada tenían que ver con Portishead. No eran Jamiroquai emulando hasta la saciedad a Steve Wonder. CocoRosie tienen su propio sonido, un tanto perturbador, una frágil melodía a punto de romperse, con ese ruido de bisagras que chirrían por falta de tres en uno, o esos engranajes donde Chaplin sufrió un tremendo masaje en blanco y negro.
Tomado de http://contradiccio.iespana.es
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1 comentario:
Bajando. Me ha ido bien con las otras recomendaciones. Todo bien orion
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